Nápoles la ciudad que se resiste a ir al ritmo que marca Europa, generando su propio forma de funcionar , siendo igual de europea que cualquier otra sin renunciar a nada ,demostrando que es posible sin seguir un patrón urbanístico, de trafico, de gastronomía incluso un idioma distinto su propio italiano.
Un ejemplo de cuidad sin reglas, en las calles circulan tranvías, coches, motos, personas sin ninguna regla clara, las personas no miran para cruzar, porque saben que tienen preferencia y los vehículos se paran milagrosamente, cosa que no entendía el primer día, pero en unas horas lo puse en práctica y si es cierto, puedes pasar sin que un monigote verde te de paso.
Lo primero que se debe hacer al llegar a Napoli si llegas en tren ,es tomar na tazzulell e cafe
, en la cafetería de la marca Illy de la plaza Garibaldi es una joya gastronómica por 80 céntimos de Euro, a unos 15 minutos de la pizzería “Da Michele” sitio ideal para los que somos indecisos a la hora de elegir plato en la carta, a Maradona también le gustaba venir cuando vivía en Nápoles,
solo hacen dos tipos de pizza la marinara que es salsa de tomates de San Marzano de la ladera sur del Vesuvio y la mejor margherita del planeta con mozzarella de bufala , pedí con doble de queso ,
puedes acompañar con una cerveza Peroni que ponen de 600cc o con agua con gas natural Ferrarelle buenísima .Estos días se ha filmado una de las escenas más importantes de la ultima película de Julia Roberts "Fat ,pray,Love" el staf quedara inmortalizado.
En la vía Toledo se mezclan las tiendas de lujo y trendis mezclado con el mercadillo típico de gitanos y chinos vendiendo baratijas.
Pasear por el barrio español te da una idea lo especiales que son los napolitanos,
los altares cristianos en cada casa es como el vaticano en versión trash.
Texto : G.L
Fotos : Atrovent
Asistente traduccion : Ramona Angeloni
